La presentación de la última película de Cesc Gay, Una Pistola en cada Mano, ha supuesto un día de encuentro con la prensa y muchas entrevistas para Javier Cámara, uno de los rostros más conocidos de su enorme reparto. Seguramente estará cansado, es la última entrevista del día, pero no se nota lo más mínimo. Reflexivo y preocupado por la situación que atraviesa el país y la industria, Javier nos habla de eso y de cómo una comedia puede animarnos el día, de sus futuros proyectos y de un rodaje muy peculiar, en esta entrevista que nos concedió.
La presentación de la última película de Cesc Gay, Una Pistola en cada Mano, ha supuesto un día de encuentro con la prensa y muchas entrevistas para Javier Cámara, uno de los rostros más conocidos de su enorme reparto. Seguramente estará cansado, es la última entrevista del día, pero no se nota lo más mínimo. Reflexivo y preocupado por la situación que atraviesa el país y la industria, Javier nos habla de eso y de cómo una comedia puede animarnos el día, de sus futuros proyectos y de un rodaje muy peculiar, en esta entrevista que nos concedió.
¿Cómo surge para ti este proyecto tan distinto a lo que podemos ver en la cartelera normalmente?
Bueno, imagino que estos proyectos tan distintos que están saliendo son las nuevas estructuras cinematográficas, que uno se tiene que buscar un poco la vida para hacer pelis. Lo que pasa es que Cesc (Gay) tiene la variante de que, como es un buen escritor y un buen guionista y hace películas que a muchos actores han gustado, es verdad que estas historias trufadas te permiten la posibilidad de ser protagonista dentro de una historia pequeña, entonces tienes muchos protagonistas, haciendo historias muy especiales. Yo creo que él ha tenido la suerte de contar con unos actores fantásticos que se han ido adhiriendo a las historias. Creo que hay que inventar nuevas formas de producción, y juntar a estos actores hace diez años en una película era imposible. Evidentemente todos han bajado el caché al límite, pero por suerte todos estamos trabajando en otras películas, pero queríamos participar en una historia así. Y va a haber muchas más historias así, porque las cosas no están tan fáciles.
Hablas del reparto, porque posiblemente se ha juntado el reparto del año en cine español.
Totalmente. Pero por ejemplo estaba mirando en el Twitter el reparto de la última de Álex de la Iglesia, y no está nada mal tampoco, y estoy en el reparto de Pedro Almodóvar la siguiente y tampoco está nada mal. Me da la sensación de que ahora los repartos tienen que ser más amplios, evidentemente, y que de repente necesitas más ayuda para lanzar películas hacia el público, que esté más deseoso de ver a un actor, una historia… Necesitas un gran reparto para estar bien arropado ante la vorágine de pelear contra las “major”, porque cada vez hay menos pasta para promocionar, para marketing… Hay películas que lo tienen que hacer así ahora.
Una película que en realidad son cinco historias pequeñas. ¿Cómo se plantea eso a la hora de trabajar?
Bueno, no te lo planteas así. No. Te ofrecen una historia… Alguien me dijo cuando empecé, no hay personaje pequeño. Hay actor pequeño. Nunca hay personaje pequeño. Cada personaje requiere la dignidad, el esfuerzo y la dedicación y tú tienes que darlo todo para ese personaje. Yo creo que es cierto, y todos los que estábamos encima de ese escenario en la rueda de prensa lo sabemos. Sabes que hay personajes que te harán volar y están en tres páginas de una película, muchas veces. Y además esta cinematografía nuestra ha demostrado con repartos como los de Buñuel, Berlanga, Almodóvar o muchos otros directores, como Álex de la Iglesia también, que los grandes repartos hacen que personajes muy pequeños brillen dentro del cosmos estelar de una película. En esta historia tenías el privilegio de estar sentado al lado de una actriz y tener una escena para ti solo. En esta historia compartir con Clara Segura esa escena… es un privilegio.
Y unas escenas en las que, sin mover ni una coma del guión, se consigue una naturalidad en los diálogos magnífica. Eso requerirá de cierto esfuerzo.
Bueno, es que estaba ya en el guión. Cuando el guión viene ya muy curradito, es mucho más sencillo. Hay una red en la que te caes, no te caes con todo el equipo a la piscina vacía, sino que hay agua. Entonces, ante un buen guión hay más confianza. Después sabes que hay una actriz en la que confías, un director en el que confías… pero sabes que hay alrededor los mimbres necesarios para construir un buen edificio en la historia. Eso sí que es bueno. Se hace muy poco caso al guionista en España. El guionista es un puesto denostado, y yo creo que hay que darle mucha más importancia. Porque si ahora mismo el cine americano y las series americanas están triunfando es porque hay grandes historias e historiadores detrás. Grandes personas historias muy bien escritas y muy bien analizadas. Yo creo que aquí habría que dar más espacio a los guionistas que son los que se lo merecen.
Hablabas antes de la crisis, y no hace mucho tiempo Daniel Sánchez Arévalo nos comentaba que casi va a haber que celebrar los inicios de rodaje, en lugar de los finales, de lo difícil que es levantar un proyecto. ¿Tan complicado se ha convertido?
Totalmente. Mira, yo voy a hacer ahora una historia en Nueva York, que la está levantando Beatriz Bodegas, y llevamos cuatro años con esta historia. Y Elvira Lindo ha escrito un guión precioso, y vamos a estar Raúl Arévalo y Carmen Ruiz, y lo va a dirigir Jorge Torregrossa que acaba de hacer Fin… todo es para bien, y vamos a ir a rodar allí que es muy complicado, y es verdad que es una dificultad, pero conseguir los patrocinios, la ayuda… La productora está por todos los medios tener una producción, está recortando por todos los sitios, está intentando que esto sea lo suficientemente digno… Estamos trabajando todos a favor para conseguir que la película vaya hacia delante. Y es una de las películas en las que he estado más cercano, pero estoy convencido de que las películas ya no se montan ni en un año ni en dos. Los proyectos tienen que ser labrados durante mucho tiempo. Y eso es culpa de muchas cosas. De la situación que ahora mismo está minando el ánimo de médicos, profesores o de la población en general.
¿Y cómo salimos de aquí?¿Cómo se salva el cine español?
No, el cine español va a salir andando como van a salir andando todos los demás. El camino va a estar lleno de piedras, y habrá que ir limpiando los laterales porque se llenarán de maraña y de zarzas. Pero hay que seguir caminando, hay que seguir haciendo historias. Creo que hay una tendencia a la comedia desde el cine español ahora mismo. Entonces la gente va a poder reír. Vamos a aportar una risa, vamos a intentar llenar el cine con las sonrisas de la gente. Podemos aportar eso. Podemos aportar muchas más cosas, pero, al menos, vamos a seguir haciendo películas. Seguimos haciendo películas y los políticos dirán “¿Ves cómo puedes hacer películas por menos dinero?”, pero ya no puedes ir a rodar a un hospital porque tendrás que construir el hospital con tres paredes baratas. Y sí, es verdad que la imaginación se va a disparar, es verdad que los teatros están creando nuevas salas para muy pocos espectadores. Las mentes se cambian y las ideas se transforman. Tenemos ejemplos como los de Argentina hace unos cuantos años que supuso una reutilización de los espacios escénicos. Pero habíamos conseguido un nivel cultural muy importante, unas redes muy importantes que se pueden venir abajo por la falta de ayuda.
En tiempos de crisis, lo que el espectador quiere ver es una película como esta, que le haga reír durante 90 minutos y olvidarse de sus problemas…
Pues sí. Me gustaría que las entradas de cine fueran más baratas, que el cine no subiera tanto. Pero el recibo de la luz va a subir mucho más en los próximos años. Y la gasolina. Y los sueldos están bajando. ¿A dónde nos lleva todo esto? Es que no quiero pronunciar ciertas palabras, porque soy individualista y positivo. Quiero que mi alrededor más cercano esté bien e intentar transformarlo y no irme a causas que no conozca. Intento que mi trabajo esté bien hecho, que mi gente esté bien… Pero sí es cierto que a veces es muy complicado levantarse por las mañanas. No en mi caso, estoy hablando de la gente que me rodea. Hay mucha gente pasándolo muy mal, ¿Qué podemos aportar? Ahora mismo, aporto una sonrisa.
Hablabas de ese proyecto que se va a rodar en Nueva York, pero, ¿qué más guarda el futuro para Javier Cámara?
Pues tengo la película de Pedro Almodóvar que ya tiene fecha de estreno y es el 8 de Marzo, y un pequeño proyecto que hicimos Isabel Coixet, Candela Peña y yo. No sé cuándo se estrena, ni he podido ver nada todavía porque Isabel está en Cardiff rodando un proyecto internacional y montando ésta a la vez. Lo único que sé es que Pedro estrena, y estrena una comedia, y lo hace el 8 de marzo. Y eso traerá sonrisas también.
Jesús Usero.
COMENTA CON TU CUENTA DE FACEBOOK
