Última entrega de este resumen sobre lo más interesante que el cine nos ha dejado en esta década. Llegamos así a los puestos de honor, las 24 mejores películas que este compulsivo espectador ha podido ver en las salas de cine en estos diez años, matizando, como hice en la primera entrega, que solamente han sido tenidas en cuenta las películas proyectadas en los cines convencionales, es decir, obviando filmotecas, cine-clubes o salas de arte y ensayo. Y no porque ese cine sea desdeñable, más bien al contrario, ya que probablemente mucho cine proyectado en esos círculos minoritarios supere en calidad al aquí recogido. Pero lo cierto es que en su mayor parte esas películas son de difícil o imposible visionado para alguien que no resida en una ciudad grande, con mayores posibilidades de acceso a cultura y proyecciones. Éste es, en fin, un recorrido por lo mejor del cine más reconocido y comercial. Habrá discrepancias, y seguro que lo mejor de esta lista serán los debates cinematográficos que esas discrepancias provoquen.
24. GANGS OF NEW YORK, de Martin Scorsese (2002)
Dividió a la crítica, y a buena parte del público. Yo me alineé con los que la defendieron con pasión. Gangs of New York me pareció una maravilla, un fresco histórico sobre la configuración poblacional de la ciudad más importante del mundo. Los gángsters que Scorsese nos mostró distaban mucho de los que hasta entonces conocíamos en su cine. Eran clanes que luchaban por sobrevivir, por encontrar su parcela de poder, y no por dominar determinados mercados ilegales como en buena parte del cine del maestro. Con una premisa nada original (el deseo de venganza de un hijo contra el asesino de su progenitor), Scorsese nos contó una historia apasionante en una película que muy probablemente sufrió los tijeretazos del estudio, nada confiados de que las intenciones del director triunfasen en taquilla. Pero aún así, el resultado final fue, en mi opinión, magnífico. Y el personaje del enorme Daniel Day-Lewis, Bill «El Carnicero», permanecerá para siempre en mi memoria cinéfila. Diez nominaciones al Óscar, entre ellas las correspondientes a mejor película, director, actor (Daniel Day-Lewis) y guión. Se fue de vacío, pero a mi me sigue pareciendo buenísima.
23. SPIDERMAN 2, de Sam Raimi (2004)
Raimi dejó lo bueno de la primera película, y corrigió lo menos bueno. Spiderman 2 es la mejor película que me temo nunca se habrá hecho sobre el mítico personaje de La Casa de las Ideas. Desde los increíbles títulos de crédito, con esos preciosos bocetos del gran Alex Ross resumiendo la primera parte, hasta su trama argumental, con los típicos agobios de un Peter Parker desbordado por el hecho de que un gran poder conlleve una gran responsabilidad…sin olvidarnos de ese imponente villano que fue el Dr.Octopus encarnado por Alfred Molina, sin duda mucho más logrado que el Duende Verde de la primera. Óscar a los mejores efectos visuales.
22. EL PIANISTA, de Roman Polanski (2002)
Probablemente la más sobrecogedora película sobre la II Guerra Mundial y el Holocausto, junto con esa obra maestra que es La Lista de Schindler. Polanski adaptó las memorias del músico polaco de origen judío Wladyslaw Szpilman, quien sufrió en sus carnes toda la crudeza del episodio histórico más cruel y dramático de la historia de la humanidad. Óscar para un soberbio Adrien Brody, también para Polanski como director y para el guión de Ronald Harwood. Una de las mejores películas de uno de los mejores directores de nuestro tiempo.
21. SIN CITY, de Robert Rodriguez (2005)
Frank Miller no tuvo más remedio que rendirse al talento y compromiso de un Robert Rodriguez que sólo pretendía ser fiel a las viñetas del cómic. Sin City supuso una revolución visual que demostró que puede adaptarse cualquier obra del noveno arte sin tener que defraudar a todos aquellos que veneran el original. Quizás lo peor fue que el propio Miller copió el estilo en su inefable adaptación de The Spirit.
20. LOS LUNES AL SOL, de Fernando León de Aranoa (2002)
Aún reconociendo que resulta difícil de creer que los protagonistas suelten las ingeniosas frases y los afilados diálogos que León de Aranoa pone en sus bocas, Los Lunes al Sol se ganó a crítica y público en 2002 gracias a su entrañable historia, y a unos actores en estado de gracia. Bardem, Luís Tosar y todos los demás estaban realmente impresionantes, aunque nos chirriase que gente de su estrato social fuese capaz de hablar como auténticos académicos de la lengua. Pero lo mismo le pasó al director y guionista en Princesas, en donde las prostitutas protagonistas también mostraban un dominio del lenguaje abrumador. Pero las virtudes del cine de este gran director superan con creces a esos nimios detalles.
19. LA GUERRA DE LAS GALAXIAS; EPISODIO III, LA VENGANZA DE LOS SITH, de George Lucas (2005)
El 19 de mayo de 2005 se completó la más importante saga cinematográfica de la historia del cine. A mi me encanta este Episodio III, me parece sin duda la mejor de la trilogía nueva, aunque muy alejada de los episodios IV y V, pero muy cerca del VI. Lucas supo empalmar de forma magistral el look totalmente digital de las nuevas películas con el cartón-piedra de las antiguas. Asistimos al nacimiento de una leyenda, ese Darth Vader que lideraría cualquier clasificación sobre los villanos más famosos de la historia del cine.
18. LOS INCREÍBLES, de Brad Bird (2004)
Cuando en la segunda entrega de este ránking hablaba sobre Wall-E, decía que era la mejor de Pixar, sólo superada por Up. Pero cometí el enorme error de olvidarme de Los Increíbles.Para alguien como yo, que creció rodeado de cómics y soñando con historias contadas en viñetas, esta película fue una fiesta, una inolvidable mezcla entre el séptimo y el noveno arte, con la que Pixar se apuntó a la grandiosa unión de cine y cómic. Personajes estupendos, desde esa familia increíble hasta la cool Edna, la diseñadora del vestuario superheroico, para una de las mejores películas animadas de la historia.
17. GLADIATOR, de Ridley Scott (2000)
Ridley Scott resucitó el peplum con esta maravillosa película en la que los más avanzados efectos visuales se pusieron al servicio de una historia épica que conmovió a los que añoraban las películas «de romanos». Scott estaba muy necesitado de un éxito así, ya que con sus tres pelis anteriores, 1492, Tormenta Blanca y La Teniente O’Neill se había llevado tres bofetadas gigantescas. Pero Gladiator le volvió a poner arriba. Doce nominaciones al Óscar y cinco premios, entre ellos el de mejor película y el de actor para un sobresaliente Russell Crowe. Y un indiscutible éxito de taquilla.
16. EL DESAFÍO, FROST CONTRA NIXON, de Ron Howard (2008)
Enorme y grata sorpresa la que resultó ser esta película en la carrera de un Ron Howard más acostumbrado a un cine frívolo e inocuo. Pero en Frost/Nixon se puso el traje de cronista de una época difícil para un país que vio como su Comandante en Jefe reconocía ante una millonaria audiencia que había cometido actitudes de dudosa legitimidad. Lo que hizo Frank Langella fue sencillamente antológico, metiéndose en la piel de un Nixon superado por la presión del periodista David Frost, que acorraló al ex-presidente hasta obtener la mítica confesión. Cine con mayúsculas.
15. ATRÁPAME SI PUEDES, de Steven Spielberg (2002)
Otra de esas películas de Spielberg en las que el cineasta demuestra ser capaz de seducir con obras carentes de fanfarria y efectos visuales. La historia de Frank Abagnale Jr. era lo suficientemente atractiva como para que el director más poderoso de Hollywood se interesase en llevarla al cine. El mejor trabajo de DiCaprio en mi opinión, quien contó además con un antagonista de lujo en ese Tom Hanks al que Spielberg seguía regalando papeles geniales, después del John Miller de Salvar al Soldado Ryan y justo antes del Viktor Navorski de La Terminal. Y no sería justo olvidarnos de un secundario pero meritorio Christopher Walken, nominado al Óscar por su papel.
14. CHICAGO, de Rob Marshall (2002)
Uno de los mejores musicales de los últimos años, y la demostración de que aunque el género parezca abandonado, siempre hay cineastas que se esfuerzan por devolverlo al lugar que ocupó en los 40 y 50. Rob Marshall hizo que Richard Gere, Catherine Zeta-Jones y Renée Zellweger bailasen y cantasen como nunca lo habían hecho en sus carreras, aunque Gere ya se había acercado a esta temática y género en Cotton Club. La mejor película de 2002 en mi opinión, con Óscars para Catherine Zeta-Jones como actriz de reparto, además de los correspondientes a mejor película, dirección artística, vestuario, montaje y sonido.
13. CRASH, de Paul Haggis (2004)
Paul Haggis ha sido, indiscutiblemente, uno de los nombres propios de la década. Y es que rara vez un guionista de cosas como la serie Walker Texas Ranger pasa a firmar buena parte de los más interesantes libretos de estos diez años. Sandra Bullock, Ryan Phillippe, Matt Dillon y Brendan Fraser realizan los mejores trabajos de sus carreras, mientras que Don Cheadle está tan bien como siempre. Óscar a la mejor película en 2004.
12. UNA HISTORIA DE VIOLENCIA, de David Cronenberg (2005)
Todo un giro en la filmografía de un David Cronenberg que con Una Historia de Violencia comenzó a alejarse de la Nueva Carne que había estado siempre presente en su carrera. Se demostró que el cine puede valerse del cómic no sólo para adaptar historias de tipos vestidos con leotardos que saltan de tejado en tejado, y la novela gráfica de John Wagner y Vince Locke fue magistralmente adaptada por un Cronenberg que sacó lo mejor de Viggo Mortensen, Maria Bello y Ed Harris. Quien en mi opinión no estaba tan bien era William Hurt, algo sobreactuado, pero que sin embargo fue nominado al Óscar por su papel.
11. MINORITY REPORT, de Steven Spielberg (2002)
Grandiosa película en la que Spielberg adaptó al siempre complicado Philip K.Dick. Una estupenda muestra de la mejor ciencia ficción contemporánea, en la que Tom Cruise se ve inmerso en una trama de corrupción del sistema de pre-crímenes que trata de resolver los delitos antes de que se produzcan. Una apasionante mezcla de cine de acción, cine negro y, como no, ciencia ficción, con espectaculares escenas e innovadores efectos espciales.
10. MATCH POINT, de Woody Allen (2005)
Para mi, el mejor Woody Allen no ha sido el que tanto nos ha hecho reír, sino éste que nos contó una extraordinaria historia de suspense y ambición, sobre el destino, la suerte, y las consecuencias de las decisiones difíciles que uno toma en su vida. El genial cineasta neoyorkino se acercó a Hitchcock con una solvencia inesperada, y nos regaló una intensa y apasionante película. Un guión asombroso por el que Allen fue nominado al Óscar.
9. COLLATERAL, de Michael Mann (2004)
La mejor película de Michael Mann, Collateral tiene todo lo que el buen cine está obligado a tener: un guión sin fisuras, unos intérpretes competentes y un ritmo narrativo extraordinario. Una historia sorprendente sobre un asesino a sueldo cuyas actuaciones siempre parecen estar milimétricamente pensadas, aunque las consecuencias de sus actos terminen arrastrándole a la perdición. Nunca Michael Mann rodó una obra tan redonda, tan completa, y nunca Tom Cruise y Jamie Foxx estuvieron tan bien, aunque éste último si logró con Ray la estatuílla que se le resistió con Collateral.
8. BROKEBACK MOUNTAIN, de Ang Lee (2005)
Ang Lee nos ofreció, en mi opinión, la mejor película de 2005, ligeramente superior a Crash. El director taiwanés se arriesgó con una película comprometida con la igualdad y la tolerancia, un precioso canto al amor protagonizado por dos vaqueros homosexuales. La Academia de Hollywood no se atrevío a darle el premio gordo, pero las ocho nominaciones y los tres Óscars fueron ya una excelente noticia viniendo de una institución tan ultra-conservadora. Una maravillosa y dura película.
7. EL CURIOSO CASO DE BENJAMIN BUTTON, de David Fincher (2008)
SPOILERS
Una preciosa historia de amor que, a través de un guión sobresaliente y original, habla de temas tan universales como la muerte, la soledad y el paso del tiempo. Como si de una afortunada mezcla entre Dickens, Tim Burton y David Lean se tratase, Benjamin Button me ganó para su causa gracias a su capacidad para conmover, sobre todo con el inevitable componente dramático que toda historia de amor imposible tiene que tener. Enormes Brad Pitt y Cate Blanchett, y antológica y entrañable esa escena final en la que una anciana Daisy coge de la mano a un imberbe Benjamin, dos enamorados de edades parecidas y físicos radicalmente distintos. Y qué decir de la muerte del pequeño Benjamin, un bebé de ochenta y muchos años que cierra sus ojitos feliz, porque sabe, que, a pesar de su curiosa y agitada vida, muere en brazos de la mujer a la que siempre amó, desde el primer momento en el que la vió, cuando él era un anciano de dieciséis años y ella una feliz adolescente. La mejor película de un 2009 pródigo en buen cine.
6. CAMINO A LA PERDICIÓN, de Sam Mendes (2002)
Una de las películas más infravaloradas de la década. De nuevo el cómic proporcionó al cine una historia alejada de superhéroes y supervillanos, y Sam Mendes lo bordó poniendo en imágenes la excelente novela gráfica de Max Allan Collins y Richard Piers Rayner. Cine de gángsters con un reparto excepcional, en el que el gran Paul Newman nos ofreció su último gran trabajo.
5. MILLION DOLLAR BABY, de Clint Eastwood (2004)
Una obra maestra del último gran clásico del cine americano. Clint Eastwood quiso darle a su obra una aureola de cine añejo desde el principio, con ese logo de Warner en glorioso blanco y negro. Enormes Eastwood, Morgan Freeman y por supuesto una Hillary Swank que ofrece la mejor interpretación femenina de los últimos tiempos. Cine grande, inmenso, cine de un calibre superior que pocas obras alcanzan en la actualidad. Clint Eastwood dejó definitivamente el poncho y se sentó en la silla de director con la grandeza de los mejores de siempre.
4. EL PROTEGIDO, de M.Night Shyamalan (2000)
Shyamalan lo vió venir. Se iniciaba una década decisiva en la fructífera relación entre el cine y el cómic, y aunque con esta película no logró la unanimidad con la que se alabó El Sexto Sentido, en mi opinión sí logró superarse. El Protegido me atrapó en la butaca, con su atmósfera de suspense e incertidumbre y ese final sorprendente que ya se instauraba como «marca de la casa» en el cine del hindú. Una obra maestra despreciada por muchos, que yo no me canso de ver.
3. KILL BILL, de Quentin Tarantino (2003-2004)
Tarantino es sin duda la gran aparición en el panorama cinematográfico en los últimos veinte años. En esta década nos ha ofrecido, además de los dos volúmenes de Kill Bill, Death Proof y Malditos Bastardos, sin olvidarnos de los dos eléctricos y asfixiantes episodios de CSI. Pero su díptico sobre La Novia y su sangrienta venganza constituyen lo mejor que el genio ha aportado en este tiempo. Cambio de rumbo en su filmografía, homenajeando al cine de artes marciales que consumió compulsivamente en su etapa como dependiente de videoclub, y rescatando del olvido al recientemente fallcido David Carradine.
2. EL CABALLERO OSCURO, de Christopher Nolan (2008)
No niego que se hayan producido películas en esta década que superan en virtudes a El Caballero Oscuro, pero en mi lista de lo mejor de estos diez años esta película tenía que estar muy arriba. Crecí con Batman, con sus cómics y con la maravillosa película de Tim Burton de 1989, y en 2008 volvimos a bailar a la luz de la luna gracias a un Joker mucho más sanguinario y anárquico que el que Jack Nicholson nos ofreció en aquella película. El Batman de Nolan es radicalmente distinto al de Burton, y es cierto que la trágica e inesperada muerte de Heath Ledger impregnó a la película de un halo de posteridad y trascendencia con el que no se contaba en un principio. Pero más allá de eso, The Dark Knight es una impresionante película, un thriller urbano en el que el bueno se viste de murciélago y el malo se disfraza de tétrico payaso. El Batman de goma quemada de Nolan enterró definitivamente los despropósitos de Schumacher, y situó al personaje en el olimpo cinematográfico que se merece. Y a mi sólo me queda agradecer a Chris Nolan, y, esté donde esté, a Heath Ledger…
1. La Trilogía de EL SEÑOR DE LOS ANILLOS, de Peter Jackson (2001-2002-2003)
El mundo ha cambiado, lo siento en el agua, lo siento en la tierra, lo huelo en el aire… Y el cine cambió con la mastodóntica adaptación que Peter Jackson realizó de la obra de Tolkien. No sé si se habrán hecho películas mejores en estos diez años, pero de lo que sí estoy seguro es de que la trilogía de El Señor de los Anillos ha sido, si duda, el acontecimiento cinematográfico de la década. Nunca se había rodado un proyecto de semejantes características, y por supuesto nunca de la forma en la que lo hizo el director neozelandés: 274 días de rodaje en los maravillosos escenarios que la tierra natal del cineasta ofrecía para recrear la Tierra Media. Lo mejor del resultado final es que la fantasía, el cine de evasión, de espada y brujería, el cine épico y de aventuras, el cine de género, logró al fin el reconocimiento unánime, con un descomunal éxito de taquilla y un total de treinta nominaciones al Óscar, con un reconfortante pleno para El Retorno del Rey, que logró once estauíllas de once nominaciones, situándose al mismo nivel que Ben-Hur y Titanic como películas más premiadas de la historia. Peter Jackson nos hizo partícipes de la mayor aventura jamás contada, algo por lo que los fans de Tolkien le estaremos eternamente agradecidos.
Y así concluye este repaso por las 100 mejores películas de la década 2000-2009. Pero, como dije en las entregas anteriores, quiero nombrar una serie de películas que bien podrían haber entrado en la lista, ya que han sido obras importantes de estos diez años. En el orden que queráis, éstas son:
POZOS DE AMBICIÓN
AMANECER DE LOS MUERTOS
MONSTRUOS, S.A.
MULLHOLLAND DRIVE
AMÉLIE
EL VIAJE DE CHIHIRO
HOTEL RWANDA
HACIA RUTAS SALVAJES
AMORES PERROS
CARTAS DESDE IWO-JIMA
DIAMANTE DE SANGRE
EL ÚLTIMO REY DE ESCOCIA
EL JARDINERO FIEL
[REC]
LA ÚLTIMA NOCHE
NO ES PAÍS PARA VIEJOS
FEMME FATALE
PROMESAS DEL ESTE
SIN MOTIVO APARENTE
X-MEN
INDIANA JONES Y EL REINO DE LA CALAVERA DE CRISTAL
MUERE OTRO DÍA
BUSCANDO A NEMO
HELLBOY
VOLVER
LOS ABRAZOS ROTOS
THE VISITOR
LA DUDA
REVOLUTIONARY ROAD
SOY LEYENDA
YO, ROBOT
LA VIDA MANCHA
MAMMA MIA!
MISSION IMPOSSIBLE II
PLANET TERROR
SHINE A LIGHT
INFILTRADOS
SUPER SIZE ME
LA GUERRA DE LOS MUNDOS
TROYA
Y, por supuesto, el AVATAR de un James Cameron que ha vuelto al cine devolviéndonos la ilusion por sentir la magia en la butaca como hacía tiempo que no nos ocurría.
Termina una década, y empieza otra…Esperemos que los próximos diez años nos traigan más buenas películas, y que cuando pasen yo pueda seguir recogiendo aquí lo mejor de ese período.
A los lectores y responsables de la revista Acción, y a los visitantes de su web, Feliz Navidad, y, como digo siempre, nos vemos en el cine…