Ya está confirmado y preparado el nuevo Bond, que será la vigésimo cuarta entrega de la saga, con Daniel Craig interpretando nuevamente al agente secreto más conocido de todos los tiempos, por penúltima vez, y de nuevo con Sam Mendes como director de la misma. En este caso el título es 007 Spectre, haciendo clara alusión a la organización que fue rival de Bond durante gran parte de la saga y que, en parte, se había dejado intuir en las dos primeras películas de Craig. Ralph Fiennes, Naomie Harris, Ben Whishaw y Rory Kinnear repiten, y se suman a la saga nombres tan interesantes como Christoph Waltz, como el nuevo villano, Monica Belucci y Lea Seydoux como las chicas Bond, Dave Bautista como uno de los secuaces de Waltz y Andrew Scott, popular por su enorme papel en Sherlock, en un personaje del que se desconoce su peso en la trama. Todo suena más que apetecible en el nuevo Bond.
Lo que sabemos de la trama es que un críptico mensaje del pasado de Bond le sitúa sobre la pista para destapar una siniestra organización. Al tiempo que M lucha contra las fuerzas políticas para mantener con vida a los servicios secretos, Bond desgrana las capas de engaños tras los que se oculta SPECTRE para desvelar la terrible verdad que allí se esconde. El rodaje se centrará en los míticos estudios Pinewood, con localizaciones en exteriores como Londres, Ciudad de México, Roma o Tánger, y la nieve, que regresa en Sölden o el lago Altausse. Pinta genial el nuevo Bond, en el que Waltz finalmente no será uno de los villanos clásicos, sino un nuevo personaje, Oberhauser, mientras la mezcla de belleza, madurez (Belucci) y juventud (Seydoux) de las chicas Bond suena simplemente espectacular. Esperemos que esté a la altura de la brillante Skyfall.
Jesús Usero
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