fbpx
AccionCine tu revista de cine y series
12.5 C
Madrid
sábado, abril 20, 2024
PUBLICIDAD

Crítica El día de la bestia ★★★★ (1995) de Álex de la Iglesia

Crítica El día de la bestia

El Apocalipsis a manos de Álex de la Iglesia

En el año 1995 se estrenó la segunda película de Álex de la Iglesia, El día de la Bestia, una película que funcionó estupendamente en taquilla y que consiguió nada menos que 6 premios Goya de los 14 a los que aspiraba: director, actor revelación, dirección artística, maquillaje y peluquería, sonido y efectos especiales.

El director nos ofrece con esta película un estupendo entretenimiento pero detrás de esa fachada hay mucho más como veremos posteriormente, después de hacer un breve resumen a su sinopsis.

El sacerdote Ángel Berriatúa (Álex Angulo) cree que ha conseguido descifrar el mensaje secreto del Apocalipsis según San Juan Evangelista, confesándoselo a su compañero del santuario que muere el un misterioso accidente. Según Ángel, el Anticristo nacerá el 25 de Diciembre de 1995 en Madrid, por lo que decide acudir a la capital para tratar por todos los medios de evitar el nacimiento del hijo de Satanás.

Desde que llega a Madrid, Ángel (el padre Berriatúa) decide hacer el mal para vender su alma al diablo creyendo que de esta manera el mal le desvelará el lugar donde nacerá el Anticristo pero rápidamente se dará cuenta de que no funciona. Es entonces cuando conoce a José María (Santiago Segura), un dependiente de una tienda de discos y amante de la música satánica que se unirá a el padre Berriatúa en esta satánica misión en la que buscan convocar al demonio para averiguar dónde tendrá lugar el Apocalipsis.

Esta singular pareja decide acudir al profesor Cavan (Armando de Razza), presentador de un programa de televisión de esoterismo y fenómeno sobrenaturales que creen que tendrá los conocimientos necesarios para invocar al Diablo. Juntos invocarán al maligno, quien se presentará en forma de macho cabrío y, como es evidente, no les revela ninguna información. De esta manera empieza la carrera de estos tres personajes para salvar al mundo del Anticristo.

Lo primero que llama la atención tras ver la película es cómo nos muestran Madrid, una ciudad demacrada, oscura y corrompida por los vicios, lo que hace que nuestro protagonista se afiance en su idea de que ahí nacerá el Anticristo. Aunque la película fue rodada en su mayor parte en Madrid las escenas exteriores de la iglesia al inicio de la cinta fueron filmadas en Euskadi.

Crítica El día de la bestia ★★★★ (1995) de Álex de la Iglesia

Es indudable que la iluminación juega un papel fundamental en esta película pues Alex de la Iglesia quería que visualmente se viera esa lucha entre el bien y el mal y para ello utilizó la luz natural de un día para hacer una analogía con esa lucha, dando como resultado cuatro partes claramente diferenciadas que se relacionan magistralmente con el avance de la trama:

  1. El amanecer: Es el principio de la película cuando el padre Berriatúa confiesa a su compañero que ha descifrado el mensaje y deciden entonces trabajar juntos hasta que ocurre el incidente en la iglesia, precipitando los acontecimientos posteriores.
  2. El atardecer: Es el momento en el que este padre llega a la estación de autobús de Plaza de Castilla (Madrid), y a la vez que se va adentrando en la ciudad, en esa jungla endemoniada también se adentra en la noche.
  3. La noche: Representa la bajada a los infiernos, momento en el que este padre Berriatúa empieza a cometer pecados de diversa índole en ese viaje en busca del lugar donde nacerá el Anticristo. Es la mayor parte del metraje en el cual todas las escenas exteriores tendrán lugar de noche, momento en el que el mal muestra su cara.
  4. La mañana: Una vez salvada la situación, al final de la película, es cuando volvemos a la luz, cuando el bien vuelve a brillar tras vencer a la oscuridad, al mal.

Crítica El día de la bestia ★★★★ (1995) de Álex de la Iglesia

Tal y como anunciaba anteriormente, esta película es mucho más que un puro entretenimiento. Basta con ver detenidamente la crítica que hace del fanatismo religioso que provocando que ”hombres normales hagan cosas horribles” (como diría el propio Álex Angulo), la televisión basura la cual manipula conscientemente el contenido que ofrecen a los espectadores (Ojo! ya en el año 1995), el uso de las drogas, el uso de la violencia sin medida… Por eso, considero un error tachar esta película como una comedia cuando en todo caso sería una sátira de la sociedad, bañada en terror, suspense y acción.

El guión a manos de Álex de la Iglesia y Jorge Guerricaechevarría (La Comunidad, Los crímenes de Oxford, La Caja Kovak, Celda 211…) está muy bien hilvanado, prueba de ello es la nominación al Goya que obtuvieron aunque finalmente no lo ganaron.

Con respecto al reparto, destacan sobre todo Álex Ángulo y Santiago Segura, que en cierta manera recuerdan a Don Quijote y Sancho Panza: Ángulo (Don Quijote) viendo demonios (gigantes) por todas partes cuando en realidad son personas (molinos) y Segura (Sancho Panza) que, como fiel escudero, sigue a su señor para cumplir su misión, que en esta ocasión es acabar con el Anticristo.

Santiago Segura ganó el Goya al mejor actor revelación y, además, gracias a esta película acabó participando en Blade 2 cuando durante un vuelo, el actor Wesley Snipes vio la película y le gustó tanto su actuación que quiso contar con él en la mítica saga del Cazador Vampiros.

Crítica El día de la bestia ★★★★ (1995) de Álex de la Iglesia

Aunque Álex de la Iglesia siempre tuvo claro que quería de protagonista a Álex Ángulo, también es cierto que para los papeles de Cavan y José María se barajaron otras opciones como fueron Javier Bardem y Jorge Perugorria.

Una de las cosas que demuestra que Álex Angulo lo daba todo en los rodajes es que en la escena en que el profesor Cavan está ardiendo, cuando Angulo acudió a apagarlo se quemó realmente. Tampoco se quedaba atrás el especialista que lo dobló en la escena en que Terele Pávez (Rosario, la madre de José María) tira por las escaleras a Angulo, que en realidad era este especialista, quien quedó inconsciente durante cinco minutos debido al tremendo golpe que se pegó.

Una que se lo pasó divinamente en el rodaje fue la cabra que aparece tras el rito satánico, que por lo visto tenía cierta incontinencia y se meaba cada dos por tres, estropeando varias tomas hasta que por fin se aguantó la vejiga y quedó la escena tal y como la vemos hoy en día.

Un dato bastante curioso es que para hacer la escena del Demonio (el macho cabrío), tuvieron que recurrir a un actor sin piernas para que encajase en las estrechas patas del animal, teniendo que ser sostenido con cables para evitar que se cayera.

Y como última curiosidad ¿Sabíais que había un final alternativo? En él, el padre Berriatúa sería quien pegaba un tiro al bebe para acabar con el Anticristo pero Álex de la Iglesia la consideró demasiado fuerte y prefirió dejar la versión que tenemos hoy en día en la que los miembros de “Limpia Madrid” son realmente los malos, los Anticristo.

En conclusión, tenemos una película que puede engañar y pasar como un puro entretenimiento pero que si la vemos con detenimiento, encontraremos un montón de claves que hacen que esta película sea la mejor película de toda la filmografía de Álex de la Iglesia. Una sátira sensacional de una sociedad que no parece haber mejorado después de casi veinticuatro años y que nos regala una de las mejores actuaciones del tristemente fallecido Álex Angulo, sino el mejor, el más recordado.

Rubén Arenal

Add to Flipboard Magazine.

COMENTA CON TU CUENTA DE FACEBOOK

©accioncine 

Crítica El día de la bestia ★★★★ (1995) de Álex de la Iglesia

Revista ACCION

Rubén Arenal
Nací en Cantabria en 1987 y uno de los primeros recuerdos de mi infancia es estar con cuatro años en la sala de cine viendo La bella y la Bestia (1991) con mi padre. Pasaron los años hasta que una noche vi en televisión Lawrence de Arabia y recuerdo que tras ver la película quedé extasiado. Desde entonces, el cine dejó de ser un entretenimiento y se convirtió en una herramienta con la que aprender y crecer como persona, ya que considero que una película tiene la capacidad de arañarte por dentro y dejarte cicatrices: algunas son superficiales y se curan con facilidad y, otras, te acompañan de por vida. Después de tantas “cicatrices”, decidí escribir sobre cine para contar mis experiencias tras ver una película y mostrar las “cicatrices” que me han dejado las mismas.

AccionCine - Últimos números

Paypal

SUSCRÍBETE - PAGA 10 Y RECIBE 12 REVISTAS AL AÑO

Artículos relacionados

PUBLICIDAD

Últimos artículos