fbpx
AccionCine tu revista de cine y series
11.8 C
Madrid
miércoles, abril 24, 2024
PUBLICIDAD

Deadpool 2 ★★★★ por M.J.P.

Deadpool 2 ★★★★ por M.J.P.Mejora la primera, tiene más pasta, más personajes, más trama y más de todo.

Más cameos, más chistes, más seguridad, más entidad como película en lo argumental, frente a la construcción más de anécdota. Acción desatada y apabullante en el arranque para que no quepa dudad alguna de que en eso no va a decaer. Y luego una secuela que en muchos aspectos es más sólida que su predecesora y además sale beneficiada de la incorporación al conjunto de los personajes de Dominó y Cable.

Liberada de la obligación de presentar al personaje de toda película de orígenes, como era la primera, obligación que no obstante aquella supo manejar muy bien tirando de humor, esta segunda peripecia cinematográfica de Masacre (o Deadpool, si ustedes lo prefieren), sienta más firmemente los pies en lo cinematográfico sin dejar de echarle una buena mirada de repaso a las claves del cómic que no obstante convengamos en que no pueden pasar tal cual al cine directamente. Comprobado el éxito y la popularidad ganada por el personaje de Ryan Reynolds en el cine con Deadpool, esta segunda entrega puede sacar pecho, respirar a fondo y ganar en personalidad cinematográfica sin perder de vista que en su fórmula el chiste siempre es lo más importante, la risa es el objetivo principal y todo lo demás está en función de su capacidad para encadenar un diabólico guión que encadena y dispara bromas, guiños, cameos y otros disparates a velocidad tan trepidante que más vale estar muy atento a lo que ocurre en pantalla. El ritmo es de tal nivel, que impide que te entren ganas de bajar la vista al reloj, porque además sabes que como lo hagas, te pierdes algo fijo, lo que equivale a perderse una risa. El bombardeo de humor llega de todas partes, por lo verbal a través del diálogo, por lo visual, también a través de lo musical… y es como un laberinto que encierra chistes dentro de chistes, en una laboriosa tarea de ordeño de la sonrisa, la risa y la carcajada.

Acierta en mantener el mismo tono que la primera. Acierta en sacarle jugo a los medios más amplios que tiene sin que por ello se deje arrastrar a un despliegue visual que corte el rollo a lo esencial del asunto, sí, exacto, digámoslo de nuevo: la risa. Pero tengo la impresión de que si en la primera llevaba a cabo una esforzada labor para mantener el equilibrio entre la gamberrada y la acción, en esta segunda el juego que practica es hacer que la comedia absorba a la acción. De manera que hay secuencias trepidantes y espectaculares de peleas, tiroteos, decapitaciones, puñetazos y persecuciones, pero sin que en ningún momento nada de ello desplace a la comedia. Ocurría ya en la primera, pero en esta el maridaje entre acción y comedia es más fluido, y el ritmo lo marca más claramente la comedia.
Asistimos en Deadpool 2 a un variopinto y siempre eficaz encadenado de gags verbales y visuales que bebe copiosamente de la cultura popular y la sátira hacia las fórmulas de explotación de ocio audiovisual en nuestros días. Hay leña para todos. De buen rollo, pero leña al fin y al cabo, de esa que desde la parodia nos hace pararnos a pensar en qué mundo vivimos y qué tipo de entretenimientos consumimos. Hay por supuesto palitos bien orquestados a lo políticamente correcto y cómo está influyendo como cortina de humo moral para tapar lo que realmente importa. El chiste con los niños acaba convirtiéndose en llamada de atención hacia los abusos, por ejemplo. De manera que no seamos simplistas: no todos los chistes que hay en Deadpool 2 tienen la intención de provocar la reflexión en segundo término del espectador ni aspira ésta a ser una comedia sesuda sobre los problemas de nuestro tiempo. Pero hay numerosas oportunidades en la película para reparar en por qué el humor es un síntoma de salud mental y una señal de inteligencia, empezando por la capacidad para reírse de uno mismo que exhibe el propio Ryan Reynolds a través de su personaje. Vean las secuencias extras después de los créditos y entenderán mejora qué me refiero.

Cierto es que este es el imperio del gag, hasta el punto de que si es necesario interrumpir la acción para aprovechar mejor un momento cómico, los artífices de la película no van a dudarlo ni un momento: interrumpen. Porque aquí los chistes son como los números musicales para el musical: la verdadera salsa de todo el asunto.
Lo que le ocurre al personaje de Masacre es que ha crecido de Deadpool a Deadpool 2, para bien. Y de una forma que anuncia una larga vida en el cine si a sus promotores les viene en gana seguir con el asunto. Del original a la secuela no se nota desgaste. Han sabido superar la falta del factor sorpresa que era la primera con una mayor solidez en el planteamiento argumental y ampliando el número de convidados al festín. Han mejorado hacia la madurez el reto al que se enfrenta el protagonista, que no es ya el típico y tópico villano antagonista que vimos en la primera entrega, aunque allí supieran tratar bien el lugar común y lo previsible para convertirlo también en herramienta de humor. Aquí el reto tiene más interés, es menos tópico y sencillo.

El otro asunto que han sabido tratar muy bien es conseguir que el cargamento sentimentaloide de su trama no sea un lastre para la comedia y la acción. No lo es porque Morena Baccarin vende muy bien esa parte más emotiva manejando de forma más contenida que en la primera el papel de “novia” del antihéroe. Y no lo es porque la aparición de esos momentos emocionales está cuidadosamente milimetrada y rodeada de chistes y guiños que arropan tanto al personaje principal como a sus acompañantes, el grupo de superhéroes reunidos para la misión, ese Cable que tanto tiene en común con Terminator, esa Dominó que sirve como excusa para reflexionar y parodiar lo que vale para el lenguaje del cómic y lo que quizá no vale para el lenguaje del cine, o lo que es lo mismo, el trajín de metalenguaje que es uno de los caballos de batalla y está entre las principales herramientas de estas dos películas.

Miguel Juan Payán

COMENTA CON TU CUENTA DE FACEBOOK


©accioncine


VENGADORES: LA GUERRA DEL INFINITO XXXXX

Miguel Juan Payán
Profesor de Historia del cine, Géneros cinematográficos y Literatura dramática

AccionCine - Últimos números

Paypal

SUSCRÍBETE - PAGA 10 Y RECIBE 12 REVISTAS AL AÑO

Artículos relacionados

PUBLICIDAD

Últimos artículos