Crítica de Dragon Ball Super: Super Hero
Crítica de la película Dragon Ball Super: Super Hero
Nueva entrega de la legendaria saga, creada para los fans con mucho cariño.
Dragon Ball sigue siendo, seguramente, uno de los mangas y animes más populares de la historia. Una historia nacida hace más de 35 años que sigue siendo vigente a día de hoy gracias a las nuevas entregas en series de animación, cine o videojuegos. La última en llegar a nosotros es Super Hero, enclavada en la última serie y con muchos elementos que harán disfrutar a los fans más acérrimos de la saga y también a aquellos que profesan un especial cariño a los personajes y el universo que habitan. Si bien es cierto que me parece un poco inferior a Broly, Super Hero es una película bien orquestada que da a los seguidores justo aquello que andan buscando.
A vueltas de nuevo con el Red Ribbon, o el Lazo Rojo de mi infancia, liderado ahora por el peligroso Magenta, un científico nieto del doctor Gero, se pone manos a la obra con la intención de crear una serie de androides mucho más poderosos que cualquiera que se haya visto antes, lo que llevará al límite a varios de nuestros héroes si es que quieren conseguir vencer a tan peligrosos enemigos. Un esquema argumental que no resulta precisamente novedoso dentro del universo Dragon Ball pero que acierta en uno de sus elementos principales, poner en el centro y al frente a dos personajes que estaban llamados a ser mucho más importantes de lo que han sido últimamente, Piccolo y Gohan.
La dinámica entre esos dos personajes, explorada desde Dragon Ball Z es uno de esos elementos que se ha ido diluyendo con los años en Dragon Ball y que la película recupera sin problemas y sin aspavientos. Por una vez dejemos aparcados a Goku y Vegeta, y dejemos que sea Piccolo el gran protagonista, y bien escoltado por el personaje de Gohan. Eso nos lleva de vuelta a los tiempos en los que uno era maestro y el otro un aprendiz. Los tiempos en los que Gohan parecía destinado a heredar el manto de su padre como mayor héroe de la Tierra y el saiyan más poderoso que el mundo haya conocido. Bien por Akira Toriyama, quien firma el guión de esta nueva película.
Visualmente cumple y mucho más. Ofrece un muy buen espectáculo y una muy buena mezcla de distintos tipos de animación bien combinados, que nos llevan de la mano a un enfrentamiento final espectacular. El problema es que la historia se repite ya hasta la saciedad. No hay nada nuevo en ella, todo sabe a ya probado, todo parece ya visto. No hay sorpresas, ni elementos que nos saquen de la rutina preconcebida y conocida por todos, desde los responsables a los espectadores. Dragon ball Super: Super Hero es como un blockbuster veraniego, espectacular y cumplidor, pero lejos de ser capaz de sorprender o emocionar. Dedicada a los fans que sabrán sin duda disfrutarla y para quienes se ha concebido la película.
Jesús Usero
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