Downey Jr. y Duvall lideran este buen drama judicial. De hecho, si hay un motivo por encima de todos los demรกs para ver esta pelรญcula es, sin lugar a dudas, el duelo interpretativo entre los dos actores, perfectamente acompaรฑados por una lista de secundarios de gran calibre hasta en minรบsculos papeles. Verles cara a cara y recordar que antes de ser una gran estrella, Robert Downey Jr. era un enorme actor, merecen el precio de la entrada. A veces se nos olvida que no todo son superproducciones o cine de superhรฉroes, y que el actor que da vida a Iron Man o Sherlock Holmes, es capaz de otros registros, otras aventuras cinematogrรกficas, con menores presupuestos pero con mucha miga tambiรฉn. Y espero que nadie se confunda. No estoy atacando el gรฉnero de superhรฉroes o el cine comercial. Cualquiera que me conozca un mรญnimo sabe que me encanta.
La muerte de su madre hace que un abogado de gran รฉxito y pocos escrรบpulos regrese a su ciudad natal. Allรญ harรก frente a los recuerdos, la familia, los amores de juventud y, sobre todo, a su padre, con el que tiene una guerra abierta. Cuando รฉste รบltimo, juez de la ciudad, sea acusado de asesinato, tendrรก que defenderle en un juicio que sacarรก lo peor de ambos. Aquรญ es donde nos encontramos con lo peor de la pelรญcula, su punto dรฉbil. La sucesiรณn de tรณpicos, historias contadas una y mil veces (el pueblo al que no se quiere volver, el รฉxito profesional y fracaso personal, la hija, la lucha con el padre, el amor de juventud., los hermanosโฆ), y falta de originalidad es tan alarmante que uno sabe perfectamente lo que va a suceder a continuaciรณn. Paso por paso. Bien contado todo, con grandes actores, pero nada nuevo bajo el sol.
El reparto defiende lo suyo con enormes dosis de talento. Robert Duvall sigue siendo una presencia enorme (ojo, que el actor apareciese en Matar a un Ruiseรฑor y ciertos parecidos entre ambas pelรญculas, no parece coincidencia, la verdad) y Downey Jr. nunca le pierde el ritmo, con un par de escenas dramรกticas (la del cuarto de baรฑo es inolvidableโฆ) memorables. A su lado Vera Farmiga, Billy Bob Thornton, Vincent DโOnofrio, David Krumholtz, Dax Shepard, Leighton Meester, Sarah Lancaster o Balthazar Getty son lo que se dice un acompaรฑamiento perfecto. Lo dicho, son motivos mรกs que de sobra para ver la pelรญcula.
La parte de drama judicial, con todo el caso de asesinato y demรกs, aporta bastante interรฉs a la pelรญcula, que, con todo, dura demasiado, casi dos horas y media, pero nunca se hace aburrida. De nuevo, casi siempre gracias a los actores y su gran trabajo. Asรญ se superan algunos baches narrativos y de ritmo, algo a lo que tambiรฉn ayuda el juicio y la investigaciรณn, aunque, de nuevo, sepamos quรฉ va a suceder. No importa. Lo importante son las emociones, ese viaje de regreso al pasado que conocemos, pero que se hace interesante por quiรฉn lo vive. Esa sensaciรณn de mirar con nostalgia y tristeza el tiempo perdido, pero con la esperanza del futuro. En todo eso sale triunfante El Juez, con elegancia y soltura. Y no es fรกcil en los tiempos que corren.
Jesรบs Usero
COMENTA CON TU CUENTA DE FACEBOOK