Crítica de la película Feliz Día de tu Muerte 2
Secuela tan divertida como la original brillantemente liderada por Jessica Rothe.
Y además cambiando completamente de género, pasando de lo que era la primera entrega, una parodia del género slasher aplicando la mecánica del bucle temporal similar a Atrapado en el Tiempo. Una primera entrega que era tan simpática como inocua. Su mayor pretensión era hacer reír al espectador con su repaso al género, con las muertes cada vez más disparatadas y con un final hilarante en el que primaba el impacto antes que la propia historia. Lo conseguía con creces, además de un par de sustos magníficos que hacían que valiese la pena pagar el precio de la entrada. Nada más y nada menos. Y su protagonista, memorable, claro.
La secuela mantiene algunos de esos elementos, aunque explicar la trama puede ser más complicado que en la primera película, y además puede incluir innecesarios spoilers. Basta decir que la trama comienza como una secuela de la anterior cambiando al protagonista, pero pronto se da cuenta de que el género slasher está agotado para hacer parodia del mismo, así que pasa a otro distinto. En esta ocasión la clave está en la ciencia ficción, lo que elimina el componente de tensión y sustos del terror, aunque mantiene las muertes disparatadas. La clave sigue siendo el bucle temporal, pero desde otro punto de vista. Y con mayor ambición, porque no se conforma con entretener… Tiene algo que contar, una trama que supone un dilema para la protagonista…
Jessica Rothe no sólo conoce el medio y a su personaje, sino que lo exprime al máximo para que no olvidemos lo que está sucediendo ni quién es la reina de la función. Sobre todo cuando el drama aumenta en la secuela, que apuesta más también por el romance, su mayor error. Llega un momento en el que el romance eclipsa el resto de la historia, que tiene un giro muy interesante que permite al personaje protagonista plantearse todo desde un nuevo punto de vista. La mayor parte del tiempo esa apuesta dramática funciona, mezclada con la comedia gamberra, pero en determinados momentos se cargan las tintas con el lagrimeo innecesario de los personajes. La película necesita más escenas como la de la chica “ciega” y menos romance…
Hay mucho, mucho humor. Hay bromas sobre Regreso al Futuro, Origen o Interstellar, y además aunque se nota que si fuese categoría R saldría ganando, consigue hacer que nos olvidemos de la sangre con las muertes más salvajemente divertidas y surrealistas que se recuerdan (la del avión es inolvidable). Aunque al final vuelva al punto de partida y aunque deje demasiados cabos sueltos (esperen a la escena postcréditos) la película cumple siendo divertida, cambiando las reglas y el género y aportando un punto de drama que compensa la comedia. Es una película muy equilibrada y consciente de su papel de broma macabra. Aspira a más que la primera entrega y lo consigue… casi siempre. Pero necesita seguir puliéndose si quiere mejorar la fórmula en la tercera entrega. Y sigue siendo película de fórmula.
Jesús Usero
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