Un repaso a las cuentas de Netflix ha hecho que los analistas indiquen que el modelo de negocio de la compañía necesita que para ser rentable, las cuotas crezcan en los años venideros.
No vamos a pretender que somos expertos en economía porque no lo somos, y mejor se lo dejamos a la gente de merca2.es quienes han hecho un análisis exhaustivo del modelo de explotación de Netflix y su forma de obtener beneficios, algo que viene dado por el coste que supone adquirir nuevos usuarios (Customer Adquire Cost), y el beneficio de cada nueva suscripción en términos monetarios (Lifetime Costumer Value). Aunque los datos no son siempre claros con Netflix, la relación sería de 75 dólares de coste por 180 dólares de beneficio, que parece una cifra magnífica pero que está alejada de la realidad.
Porque para mantener esos más de 151 millones de usuarios en todo el mundo, con un mercado como el estadounidense que está ya maduro, tienes que seguir invirtiendo. Los amigos de la web acuden al teorema de Coase, que hablaba de una serie de costes que podían limitar el crecimiento de una empresa y que en el caso de Netflix son los costes de coordinación, o de producción. Para mantener a sus usuarios, para seguir creciendo, debe seguir produciendo más, crear más contenido. Ese es su coste de coordinación, y ese coste ha pasado en los últimos años de 500 millones de dólares por trimestre a 4500 millones de dólares. Eso es lo que limita la relación entre coste y beneficio y por eso este análisis es claro, ya que Netflix no va a bajar el nivel de producción y sus costes, tendrá que seguir subiendo las cuotas a todos sus suscriptores en todo el mundo… No es la mejor noticia, la verdad.
Jesús Usero
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