Aunque no de la forma más brillante, porque se esperaba más de ella, es cierto que la última película de Bryan Singer, que anda enfrascado preparando lo nuevo y esperadísimo de los X-Men, con uno de esos repartos que quitan el hipo, y con una peripecia que, como bien apuntaba mi compañero Miguel Juan Payán en la revista de éste mes, bien podría ser la versión de los mutantes de una hazaña tipo Los Vengadores. Pero mientras, Jack El Cazagigantes se estrena con 28 millones de dólares, buena cifra, pero para nada espectacular, inferior a lo esperado (que sería más cercana a los 35 millones) y similar a John Carter en 2012, que fue un fiasco como un piano. No es comparable con Carter porque, primero, ésta es mucho más barata y, segundo, le queda aún el mercado internacional para resarcirse. Pero en esas cifras parece ser que se moverá la película. Mientras Identity Thief, pese a tener unas críticas espantosas, sigue encantando al público y suma ya 107 millones de dólares, porque ésta sí que funcionó desde el primer día y más de lo esperado. Jason Bateman suele tener buen ojo últimamente para elegir sus comedias. 21 and Over se ha estrenado con unos escasos 9 millones, mucho menos que Project X el pasado año, y The Last Exorcism Part II con poco más de 8, nada especial. Modestas cifras. Mientras Snitch, la última peli de La Roca, lleva 24,4 en dos semanas, lo normal para su cine cuando trabaja como protagonista en solitario, pero con gran respuesta de la crítica. Y La Jungla 5 se queda en unos discretos 59,6 millones desde su estreno, aunque el total mundial de más de 220 millones de momento garantiza las ganancias. Por cierto que todas las ganadoras de los Oscars suben, sobre todo La Vida de Pi, que a la chita callando acumula casi 600 millones en todo el mundo.
Jesús Usero
