La comunidad de fans está dividida entre los que no aceptan el cambio del personaje en Vengadores Endgame y los que han disfrutado mucho con esta nueva variación y lo que nos depara el futuro de Thor.
Antes que nada, avisamos a nuestros lectores que si no han visto Vengadores Endgame, lo mejor es dejar de leer en este momento y pasar a otra cosa para evitar los SPOILERS de este pequeño artículo y comentario, porque los habrá. Así que, ya saben, mejor no seguir leyendo en caso de no haber visto aún la película. Porque vamos a hablar de Thor y de lo que pasa con el personaje en Endgame, algo que no ha dejado contentos a todos los fans y que puede tener una continuidad cuando el actor Chris Hemsworth ha firmado para rodar al menos dos películas más en la piel de Thor. Lo que molesta a muchos fans es que tras acabar con Thanos pero no poder revertir lo que el Titán Loco hizo, Thor se retira a la Nueva Asgard, escondiéndose hasta de su gente, bebiendo cerveza y jugando videojuegos, engordando bastante y dejando una imagen más cercana a Jeff Bridges en El gran Lebowski, algo que la propia película aprovecha para hacer bromas, que al Thor que recordamos. Otros seguidores lo han aceptado y disfrutado, pero, ¿a qué se debe ese cambio en el personaje y hacia dónde nos dirige?
Está claro que hay un momento, con la partida de Fornite y demás, que incluso lo mencioné en la crítica en vídeo. Parece que Taika Waititi ha regresado como director, para volver a hacer comedia absurda como en Thor Ragnarok. Pero luego la cosa remonta. Hay que entender dos cosas. Por un lado, Hemsworth se siente mucho más cómodo en la piel de personaje cómico con ramalazos de épica, que en la de un personaje casi sacado de Shakespeare como en la primera película de Thor. Por eso imaginamos que el propio actor ha pedido que el personaje gire en esa dirección, y por eso su inclusión al final de la película en los Guardianes de la Galaxia. No es muy difícil imaginar a Thor, gordo o de nuevo en forma, en ese grupo aprovechando la vis cómica de Hemsworth. Y por otro lado está el enorme contraste entre esas bromas y cuando la cosa se pone seria. Recordemos qué sucede con el personaje en su regreso a Asgard y su reencuentro con su madre. Recordemos el final de la película, su lucha con Thanos y su frase cuando el Capitán América alza el Mjolnir por primera vez. Thor siempre ha sido como un niño, y la derrota ante Thanos le vuelve a ese estado infantil, incapaz de aceptar la derrota y seguir adelante. Incapaz de lidiar con el fracaso, sabiendo que en su mano estuvo la victoria… Por eso se deja ir, abandona todo, se convierte en un niño que no es capaz de oír ni siquiera el nombre Thanos (acordémonos cómo acaba el encuentro con Hulk, lo que se dicen y la rabia acumulada de Thor).
No, quizá no sea la versión que todos esperábamos, pero sin duda es una versión rica y compleja. No es el Thor heroico y a veces abusa de chistes fáciles, de bromas ridículas y de una imagen sacada de la película de los hermanos Coen antes mencionada. Es evidente que el personaje es empleado como alivio cómico y que sus fans quieren más. Algo más épico. Pero cuando se quita esa máscara de payaso, cuando se muestra humano, honesto, perdido, asustado… El contraste con la otra imagen es tan poderoso que hace que el momento dramático cobre más fuerza. O al menos, esa es la impresión que me ha dado, algo que ya sucedía en Infinity War y que aquí se ha llevado al extremo. Por eso creo que funciona. Pero, de nuevo, es sólo mi opinión. No estoy diciendo que prefiera a este Thor, sino que lo entiendo y entiendo sus motivos y el camino que emprende el personaje. Yo habría apostado por otro Thor… ¿Qué opinan quienes han visto la película? Eso es lo importante.
Jesús Usero .
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