En esta ocasión no son malas noticias lo que rodean la producción de Fast and Furious 7, sino el adelantamiento del estreno de la película en Estados Unidos, que se ha adelantado una semana, al 3 de Abril de 2015, lo cual no es un enorme cambio pero supone que Universal confía en tener la película antes de tiempo, algo que quizá haya venido motivado por la reciente confirmación de que Dwayne Johnson ha terminado su parte de rodaje en la película. Adelantar una semana el estreno supone que la película tendrá todo el mes de abril antes de enfrentarse a los blockbusters veraniegos, y ya hemos visto cómo ha funcionado eso con Capitán América 2. Hasta Pacific Rim 2 ha reservado ese fin de semana para su estreno en 2017. Entre eso y las enormes expectativas generadas por la película, entendida como tributo al tristemente fallecido Paul Walker, se puede suponer que el éxito de Fast and Furious 7 no tenga precedente dentro de la franquicia.
Una franquicia que ya era más que rentable de por sí. Pero este tipo de detalles, el final del rodaje para Dwayne Johnson, un pequeño cambio para bien en la fecha de estreno de la película, son buenas noticias para una producción que, pese a todo, parece desesperada por tenerlas desde que un accidente automovilístico acabase con la vida de Paul Walker. La salida del personaje de la franquicia, que costará a la película 50 millones de dólares en efectos visuales para recrear el rostro de Walker en las escenas que no estaban filmadas, el retraso en el estreno forzado por la situación, los rumores de cancelación de la película o los últimos rumores que indicaban (todos ellos sin confirmar), que para el reparto y equipo técnico, trabajar con VIn Diesel estaba resultando imposible… Todo ello hace que dos pequeños detalles sean buenas noticias para la película y sus millones de fans.
Jesús Usero
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