Crítica de Jurassic World: Dominion
Crítica de la película Jurassic World: Dominion
Entretenida, llena de fan service, pero floja a nivel de historia y guión.
Jurassic World Dominion es el final de la nueva trilogía que cumple a la vez con la función de servir de puente entre esta saga y la anterior de la franquicia, aquella que estuvo liderada en la primera película por Sam Neill, Laura Dern y Jeff Goldblum, tres nombres que regresan en esta ocasión para hacer que ambas trilogías se conviertan en sólo una gran saga. Colin Trevorrow regresa al puesto de director y guionista después de haber dejado que J.A. Bayona rodase la segunda entrega, y lo hace con los mismos vicios y virtudes que arrastra desde la primera película, Jurassic World. De hecho, parecen amplificados en esta última entrega.
Dividida en dos tramas que se entrelazan a lo largo de la película, la historia nos presenta, con los dinosaurios ya sueltos por el mundo, a Owen y Claire, cuidando de la joven Maisie como si fuese su hija, tras los eventos de la película anterior. Cuando ella desaparezca, recorrerán el mundo para encontrarla. Al mismo tiempo Ellie Sattler se reúne con Alan Grant para que le ayude a descubrir la fuente de una plaga de langostas con origen cretácico en su ADN, lo que les llevará al santuario para dinosaurios de una empresa multimillonaria para la que trabajan Ian Malcolm y el doctor Henry Wu. La trama es algo confusa honestamente y, la verdad, a uno le cuesta saber quién hace qué y por qué. Porque el guión hace aguas tanto en la trama central como en los pequeños detalles…
Por supuesto que la vuelta de Neill, Goldblum y Dern son motivo de sobra para ver la película especialmente porque no son convidados de piedra, tienen trama propia y son lo mejor de la película sin duda, junto a la llegada de DeWanda Wise. Pero no es suficiente. Los fallos del guión (imaginen la idea de los tacones de la primera entrega pero repetida mil veces) se hacen a veces insoportables porque acuden en momentos cruciales con reiteración. Y además todo ello entremedias de una trama general caótica en la que la que lo que sucede es… extraño, y no tiene mucho sentido, como el plan del villano. Eso sin hablar de los personajes que desaparecen a mitad de película sin dejar rastro ni cerrar sus tramas…
Entre todo eso destaca un espectáculo visual de primer orden desde el primer minuto, con ese sobrecogedor y espectacular prólogo. Una película apabullante en lo visual, con un ritmo implacable, pero con detalles muy endebles en lo argumental y en el guión. La mezcla queda desequilibrada y no es capaz de emocionar, aunque sí de entretener. Salva los muebles, pero del regreso de los protagonistas de Jurassic Park juntos y con una historia que contar esperábamos mucho más. Deja un regusto algo amargo pese a ser un viaje que se disfruta y que tiene momentos realmente geniales. Menos de los esperados y deseados, pero los tiene. Podía haber sido grandiosa y se queda en espectáculo a medio gas por culpa de ese triste guión.
Jesús Usero
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