Secuela veraniega tan descerebrada y simpĆ”tica como la original o mĆ”s. Eso sĆ, no para todos los gustos ni pĆŗblicos. Sobre todo si vamos buscando comedia inteligente o similar. O si no nos hacen demasiada gracia los chistes escatolĆ³gicos que tanto abundan en las producciones de Adam Sandler y que aquĆ campan a sus anchas, a veces hasta el mal gusto mĆ”s insoportable, otras con cierto sentido del humor. Pero hay que o bien ser fan de Sandler y compaƱĆa o bien saber que se entra en la sala para disfrutar de poco mĆ”s de hora y media de humor descerebrado y muchas veces infantil. Si entramos en ese rango, podemos disfrutar la pelĆcula. Pero eso no la hace buena ni mucho menos, claro.
Los protagonistas de la primera parte (excepto Rob Schneider, lo cual se agradece, la verdad) viven ahora en el mismo pequeƱo pueblo en el que vivieron. SegĆŗn terminan las clases sus hijos preparan una fiesta para dar la bienvenida al verano. Una fiesta para cerrar viejas heridas, sentirse jĆ³venes otra vez y aceptar que ya han crecido y son adultos. O no tanto. En esta ocasiĆ³n la trama, la verdad, es una mera excusa para acumular gags y personajes nuevos, cada cual mĆ”s absurdo y surrealista que el anterior. Es decir, que el mayor defecto de la pelĆcula es que, guiĆ³n, la verdad, poco. Por no decir ninguno. Y los protagonistas, muchas veces uno no sabe si estĆ”n actuando o interpretĆ”ndose a sĆ mismos.
No voy a intentar engaƱar a nadie. Me he reĆdo con la pelĆcula. Bastante. Y como yo mucha de la prensa que la ha visto conmigo. Tiene momentos realmente hilarantes (casi toda la escena en el centro comercial, especialmente con el colgado del conductor de autobĆŗs, la propia fiesta, los colgados de la fraternidad, la rueda con David Spadeā¦ Pero tambiĆ©n tiene momentos que sonrojan al espectador por estĆŗpidos, ridĆculos o preocupantes. Ya sea por exceso de racismo (lo sufre Salma Hayek sobre todo), machismo (todos los personajes femeninos, tratados como idiotas, histĆ©ricasā¦) o escatologĆa (lo de los heladosā¦ sobra. Como el vĆ³mito por todas partesā¦).
Evidentemente la pelĆcula no pretende aprovechar los recursos dramĆ”ticos que presenta la historia (David Spade y su reciĆ©n descubierto hijo, Sandler y Hayek descubriendo si quieren ser padres de nuevo, la primera cita de la hija de Rock, James y su madreā¦), porque no tiene un guiĆ³n realmente. Prefiere acumular personajes ridĆculos y divertidos, con cameos que, muchas veces, son mĆ”s interesantes que los protagonistas. Como Taylor Lautner, Milo Ventimiglia (casi irreconocible), Shaquille OāNeal, Jon Lovitz, Andy Samberg, Steve Austin, Steve Buscemi o Tim Meadows. Con ellos la pelĆcula gana por momentos y a ratos resulta muy impredecible y divertida. Con mucho humor slapstick (la de juego que puede dar una balsa hinchable), a veces mĆ”s un tebeo que una pelĆcula, mĆ”s surrealista y salvaje que la anterior pelĆcula, mucho mĆ”s comedida y ātiernaā.
Lo dicho, a quien gustase la primera entrega, u otras pelĆculas de sus protagonistas, como Desmadre de Padre o Peso Pesado, le gustarĆ” esta nueva pelĆcula, que muchas veces resulta mĆ”s divertida (y corta) que las anteriores. Incluso llegan a reĆrse de que unos callos como ellos estĆ©n con mujeres como Maria Bello o Salma Hayek. Pero si buscas una historia, humor inteligente o un guiĆ³n medianamente hilvanadoā¦ te has confundido de sala. Una nota final. El doblaje en castellano estĆ” demasiado… localizado. Demasiados chistes convertidos en chistes de Falete o los Pekos…
JesĆŗs Usero.
COMENTA CON TU CUENTA DE FACEBOOK