Hollywood no se duerme en los laureles –nunca mejor dicho, considerando el tema de esta película-, y aprovecha la mínima ocasión para rentabilizar los éxitos de antaño con la socorrida técnica del remake. Eso ya lo sabemos. Pero tengo que confesar que al ver este segundo tráiler de Pesadilla en Elm Street me han dado ganas de romper una lanza a favor de las nuevas versiones, y en contra de la tendencia habitual de la crítica más sesuda, por varios motivos.
Hollywood no se duerme en los laureles –nunca mejor dicho, considerando el tema de esta película-, y aprovecha la mínima ocasión para rentabilizar los éxitos de antaño con la socorrida técnica del remake. Eso ya lo sabemos. Pero tengo que confesar que al ver este segundo tráiler de Pesadilla en Elm Street me han dado ganas de romper una lanza a favor de las nuevas versiones, y en contra de la tendencia habitual de la crítica más sesuda, por varios motivos.
De repente he recordado una cosa que me dijo Wes Craven, “padre” de la Pesadilla… original en una entrevista que en su momento publiqué en las páginas de la revista Acción, y es que cuando presentó este proyecto a los productores, éstos le dijeron algo así como que se iban a forrar con él, que iban a venderlo como hamburguesas.
Y eso no me parece mal. Dar con una fórmula que claramente funciona de cara al público es un acierto porque el cine es industria antes que arte.
Por otro lado en los últimos tiempos hemos tenido suerte con algunos de los remakes que se han hecho de películas de terror que hicieron furor hace un par de décadas, más o menos, así que siempre recibiré la posibilidad de ver un remake de los éxitos de antaño con cierta esperanza de que sea de los buenos, y no de los que simplemente se limitan a repetir la fórmula con poco éxito y limitada imaginación.
Finalmente no debemos olvidar que la mayoría de las películas a que me refiero, aún siendo títulos de gran éxito en su momento y posteriormente piezas de auténtico culto para los aficionados al género, nacieron en el seno de la serie B, en muchos casos no sólo con limitaciones presupuestarias, sino también con muy ajustada aportación de efectos visuales en ese momento. Como consecuencia de ello, su factura visual se vio resentida y ahora, en las nuevas versiones, llega a las pantallas reforzadas con presupuestos más holgados y con el aporte del avance en lo que a efectos visuales respecta.
Hay no obstante un lado nostálgico que me lleva a pensar que muchos de los títulos originales eran pura artesanía, cuidadas piezas de cariño por un género, el del terror, que suele sentirse más cómodo asilado en la independencia creativa que dan los presupuestos bajos que en el seno de las producciones de serie B de los grandes estudios, así que como mínimo espero que esta nueva versión rinda el homenaje que merece a la película original.
Miguel Juan Payán
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Pesadilla en Elm Street dirigida por Martin Campbell se estrenará en España el próximo 6 de agosto
