Crítica Culpa Tuya película dirigida por Domingo González con Nicole Wallace, Gabriel Guevara, Marta Hazas
Una secuela que aprovecha el éxito de la original para impulsar el universo Culpables antes de su final
De qué va Culpa Tuya
Continuación de Culpa mía, basada en las novelas de Mercedes Ron, la relación entre Noah y Nick se complica con la llegada de ella a la universidad y el nuevo trabajo de él. Eso incorpora a la historia nuevos personajes, al mismo tiempo que fantasmas del pasado regresan para atormentar a los protagonistas, que pondrán a prueba su amor.
Una secuela esperadísima que mejora la original
Cuando apareció Culpa mía, fue un momento en el que las películas basadas en libros para adolescentes estaban teniendo mucho éxito. After llegó a las cinco entregas, mientras que en Netflix arrasaba A través de mi ventana, y Prime Video se lanzó a colaborar con Pokeepsie Films, con Álex de la Iglesia y Carolina Bang a la cabeza, para convertir en película la primera novela de la saga Culpables, Culpa mía, escrita por Mercedes Ron. El éxito que llegó fue descomunal, convirtiéndola en la película de habla no inglesa más vista de la historia de Amazon. Las adaptaciones de las dos siguientes novelas eran el siguiente paso lógico.
Había un elemento en la primera parte que la hacía muy distintiva, las escenas de acción, con carreras de coches y peleas clandestinas poblando la historia de amor entre los dos protagonistas, convertidos en hermanastros al casarse sus padres. Pese a los esfuerzos en producción y a que estaban bien dirigidas, esas escenas no hacían precisamente más creíbles las tramas de la historia. Para mí, no sólo sobraban, sino que te sacaban del romance que debería ser el centro de la historia. Para la secuela, ese aspecto ha mejorado considerablemente, la verdad. Sólo hay una escena de ese estilo y tiene mayor justificación que en la anterior película.
La nueva historia se centra mucho más en el drama de los personajes, mucho más en el romance mientras los dos protagonistas descubren quiénes son realmente y qué supone su relación para ellos, con secretos, mentiras y fantasmas del pasado que vuelven para atormentarlos. Es una mejoría, pero no es suficiente porque toda la historia está demasiado forzada y cuando llega a los dramas realmente interesantes, se queda en la superficie, demasiado interesada por las historias de amor entre unos y otros. Es algo que se ve con la historia secundaria del taller y los personajes asociados a esa historia. No tiene suficiente tiempo para desarrollarse y no aporta lo suficiente.
Un reparto joven que se encuentra muy cómodo en sus papeles
El reparto lo da todo por sus personajes, y los defiende lo mejor que puede ante un guión que no da más de sí. Los dos protagonistas, Gabriel Guevara y Nicole Wallace, están muy cómodos en unos papeles que ya conocen a la perfección, y uno se pregunta qué no podrían hacer con una trama mejor elaborada. Además, hay buenas incorporaciones como Goya Toledo, Álex Béjar o Gabriela Andrada que siempre suman. A eso le sumamos los nombres que ya teníamos de Marta Hazas, Iván Sánchez, Víctor Varona y Eva Ruiz.
El resultado agradará a los fans, sin lugar a dudas, y les ofrecerá una historia que desean conocer y disfrutar, como ya han demostrado, pero se hará difícil para aquellos ajenos a la misma. No hay mucho más que contar. Esa es su intención desde el inicio, y cumple, pero cuesta mucho encontrar elementos que brillen de alguna forma en una película demasiado simple. Todo reside en el guión, que aquí no alcanza el aprobado.
Jesús Usero
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Crítica Culpa Tuya
