Crítica de la película El Hijo
Una magnífica perversión del mito de Superman.
Además que James Gunn, productor de la película, tiene buena experiencia con el universo superheroico. No sólo ha dirigido las dos primeras entregas de Guardianes de la Galaxia, además prepara la tercera y la secuela de Escuadrón Suicida, sin olvidarnos de Super, aquella gamberrada sobre vigilantes con máscara de 2010 que nos hizo reír mucho. Esta película es más seria, pero Gunn ha estado muy cerca del proyecto todo el camino, lo que le da en varias ocasiones ese tono de humor negro e irreverencia que tenían sus primeras películas, las menos desconocidas pero las más salvajes. Y además con todo el conocimiento que atesora el director, aquí productor, de su paso por el cine de superhéroes, lo que hace que la película no quede en mera gamberrada.
Imaginemos la historia de Superman, que podría ser la de su versión malvada de los cómics por ejemplo, pero con un ligero o enorme cambio. El niño que cae del cielo en una nave, adoptado por una familia de granjeros de Kansas y que pronto descubre que tiene poderes incalculables (los mismos que Superman, ni en eso se despistan un momento) no es nuestro salvador, sino que ha venido a acabar con todos aquellos que se opongan a él, camino de convertirse en un tirano que nos dominará a todos. Eso es lo que propone la película y sabe superar la anécdota argumental inicial para crear un universo de personajes ricos e interesantes, liderados por esa madre inagotable que es Elizabeth Banks, pero sin olvidar a su resignado marido, David Denman, o a Gregory Alan Williams como el sheriff…
Pero el rey de la función es sin duda Jackson A. Dunn, el joven que da vida a Brandon (hasta en esto tienen sentido del humor) el niño que vino de las estrellas. En su mirada se ve el miedo, la desolación e incluso no saber quién es realmente, y como poco a poco, según avanza la película, todo eso va desapareciendo para dar paso a otra cosa, algo mucho más terrorífico, ira, rabia… o una calma fría, casi inhumana… Cuando mira sin expresar nada, produce pánico, en un efecto que me recordaba al de los niños de El Pueblo de los Malditos, de John Carpenter…
Hay un momento de la película en el que no sabe si quiere ser cine de terror, o cine de ciencia ficción/cómic. Ese despiste momentáneo es lo único que le resta méritos a una película que cuenta mucho con muy poco. No necesita más. Pervertir la historia del gran sueño americano, donde Superman es lo que muchos temen que sea, y donde además vemos el daño que puede causar a todos los niveles. El diseño del traje de este superhombre es maravilloso, y además queda integrado en quién es realmente Brandon, y todas las referencias a los cómics de DC (es increíble que no hayan tenido que pagar derechos, en serio) son magníficas, como lo es el final o la imaginería visual de su director, David Yarovesky. Una muy recomendable película para los fans del cine de terror, de los cómics o de la ciencia ficción. Extremadamente sangrienta, terrorífica por momentos y muy valiente. Puro entretenimiento.
Jesús Usero
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