Crítica The Equalizer 3 ★★★★

Crítica The Equalizer 3 película dirigida por Antoine Fuqua con Denzel Washington, Dakota Fanning, Eugenio Mastrandrea, David Denman

La mejor de las tres películas de la franquicia. Buen cierre de trilogía.

De qué va Equalizer 3

McCall ajusta cuentas en Sicilia.

Crítica The Equalizer 3

Madurez, solidez y ganas de darle otra vuelta al personaje protagonista marcan este regreso de Denzel Washington como McCall, con dos C y dos L.

En el marco de la filmografía de su director, Antoine Fuqua Equalizer 3 está por contenido y puesta en escena más cerca de su mejor película, Día de entrenamiento, que del resto de entregas de Equalizer.

Buen aporte de Dakota Fanning

A Fuqua y a Denzel Washington se les nota aquí con ganas de darlo todo en este cierre que podría perfectamente no serlo porque, al contrario que la segunda película, esta tercera entrega no solo parece en un cierto punto de agotamiento y reiteración de propuesta, sino todo lo contrario: personaje y saga muestran una vitalidad y más calidad que en sus dos visitas anteriores.

Este tercer McCall es más interesante, tiene más riqueza como personaje que en Equalizer 1 y 2 y nos llega con identidad propia reforzada para diferenciarse de la oferta de películas de acción que nos llegan últimamente en su misma línea de producto audiovisual. El protagonista que parecía tenerlo todo ya dicho en la segunda entrega muestra que tiene mucho más que ofrecer y mucho por decir y aportar, y además queda reforzado en sus posibilidades de desarrollar nuevas peripecias en el futuro con la incorporación de la agente de la CIA interpretada por Dakota Fanning.

Un renovado McCall que es más principio que final

Es cierto que este personaje de Fanning podría tener más recorrido en la película, pero eso habría provocado por otra parte un innecesario alargamiento de metraje en una película que está muy bien equilibrada en su aporte de acción con alternancia de secuencias de ritmo más reposado siguiendo a McCall en su viaje sin acción para profundizar más y mejor en él permitiendo que, sin diálogos o con muy pocas palabras, Denzel Washington pueda lucir su talento y su profundo conocimiento y sinergia total con este solitario antihéroe que se revela aquí en su forma más oscura y tenebrosa con su verdadera naturaleza como depredador.

En ese sentido Equalizer 3 está mejor pensada en ese sentido que las dos anteriores y es mucho más sólida e interesante en la puesta en escena, que nos permite descubrir a ese McCall más oscuro, renovado, casi rejuvenecido, como si realmente este reencuentro fuera más un reinicio de algo nuevo y más interesante sobre el personaje que la conclusión de una trilogía.

Un western vertical de renacimiento

La localización es más que nunca en la saga fundamental, un cambio radical frente a los dos largometrajes que preceden a esta película. Esos paisajes sicilianos que parecen pintados en un lienzo consiguen convertirse en un personaje de la historia, y además están trabajados de una manera muy curiosa en lo que se refiere al código genérico de western que es una de las dos características definitorias de la película en la fusión de géneros que constituye su ADN.

Tras el gran plano general de paisaje que abre la película remitiéndonos a ese código visual de western, el resto de Equalizer 3 va a estar íntimamente vinculado a un tratamiento de la localización de la localidad en la que se desarrolla la mayor parte del argumento que cambia la la horizontalidad dominante en las composiciones de planos del western para explotar la verticalidad como código visual dominante.

Esa verticalidad no es caprichosa, sino que está representada con las escaleras ejerciendo como objeto significativo y define el viaje del protagonista para encontrar un camino de renacimiento tras haber llegado a esa especie de callejón sin salida que con brillantez se nos explica en el prólogo de la trama mostrando las consecuencias de su violencia.

Audiovisual italiano y temática criminal

La otra fuente de inspiración que se hace notar en la película son series italianas y los largometrajes de temática criminal con la mafia como protagonista que han marcado el audivisual europeo en los últimos años, series como Roma Criminal (2008-2010), Gomorra (2014-2021), o Suburra (2017-2020) y sus películas correspondientes. Fuqua, que inició su carrera como director de acción, área en la que sigue siendo un maestro de nuestros días, bajo la inspiración de John Woo a finales de los noventa con títulos como Asesinos de reemplazo (1998), muestra su evolución y viaje hacia la madurez, así como su capacidad para seguir evolucionando a base de recibir y aceptar la influencia de nuevas corrientes y propuestas audiovisuales.

Esta influencia del audiovisual italiano de temática criminal deja su huella en Equalizer 3 en la luz, o en ese desenlace en secuencia de montaje en paralelo con la resolución del viaje del antagonista principal y la procesión de las fiestas patronales de la ciudad-personaje y coprotagonista de la trama.

Te gustará si te gustó…

Mejor que Equalizer 1 y Equalizer 2.

                                                              Miguel Juan Payán

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